La reforma de la panadería Turris en Gracia, en la calle Gran de Gràcia de Barcelona, es una adaptación de la primera tienda diseñada en la Illa Diagonal. Reformamos el espacio de zona de venta con el objetivo de transmitir los valores de la marca, convirtiéndolo en un obrador con punto de venta. El espacio de aspecto industrial se inspira en los obradores de toda la vida, potenciando la tradición y la artesanía del oficio, con la intención de que el cliente sea más partícipe del proceso de creación.

En cuanto a la presentación del pan, se expone en cestas de mimbre que se cuelgan en perfiles de hierro verticales, combinándose con estanterías. Muebles realizados de hierro, evocando los carros utilizados en el obrador, y una larga mesa de madera con caballetes, sirven de mostradores para pan, bollería y pastelería.

Para crear un espacio neutro y funcional, se decidió forrar una pared con chapa ondulada de carácter industrial en color blanco. La fachada se rediseña para permitir una entrada más generosa de luz natural, aumentando la visibilidad de la tienda desde la calle. Igualmente, la carpintería de madera se combina con la parte superior forrada de madera de roble, que a su vez, funciona como soporte para el logotipo pintado con estarcido.

Por otro lado, como elemento diferencial en este local, se usan lámparas suspendidas en madera de pino. Se trata de un diseño creado especialmente para este espacio, gracias al cual se fijan unas linestras cálidas que aportan sencillez. Es un guiño al diseño anterior que encontrábamos en Turris Borrell, pero en este caso, se colocan en posición horizontal, añadiendo un toque distintivo al espacio.

En resumen, la reforma de la panadería Turris en Gracia, mantiene la esencia de la marca al adaptar el diseño. Con esta proyecto de interiorismo, además, se ha creado un espacio acogedor y auténtico para sus clientes.

Descubre aquí otras tiendas reformadas y diseñadas por el estudio de Sandra Tarruella Interioristas.