Chiqui Santander Fase II
Dirección creativa:
Sandra Tarruella Interioristas
Responsable:
Elsa Noms
Colaboradores:
Mariona Guàrdia
Superficie:
1.500 m2
Cliente: Fernando Sebrango
Fotografo: Salva Lopez
El diseño de interiores del Hotel Chiqui de Santander, es el segundo encargo para la familia Sebrango, en colaboración con el estudio de arquitectura Mmit Arquitectos. Promete ser un proyecto espectacular que eleva la experiencia del Hotel Chiqui a un nuevo nivel de lujo y comodidad, especialmente con el diseño de las habitaciones y la construcción del solarium con infinity pool, con vistas a la playa del Sardinero de Santander.
El concepto desenfadado y fresco del restaurante PANORAMA y las zonas comunes del hotel se ha mantenido. Por un lado, destaca la utilización de una gama cromática en tonos naturales con toques de azules y verdes refleja la ubicación junto al mar. Por otro, la elección de materiales como la cestería y fibras naturales, evoca la estética de los parasoles utilizados por los bañistas en el siglo XIX, aportando un toque histórico y elegante.
La disposición de las habitaciones se ha ubicado alrededor de un patio central, conectado al solárium. Se trata de una decisión pensada para maximizar la entrada de luz natural y enfatizar las impresionantes vistas hacia la bahía. La flexibilidad en el uso del espacio, con sofás que se convierten en camas individuales y puertas correderas para separar áreas, demuestra una atención cuidadosa a las necesidades del cliente.
La decoración de las habitaciones con detalles como mesitas metálicas, lámparas de papel, escritorios de madera de roble y baños revestidos en mármol blanco refleja una estética elegante y contemporánea.
El solárium ajardinado en el piso superior se presenta como un oasis con distintos niveles, zonas de coctelería, solárium y duchas. La piscina infinity, elevada a una altura estratégica, crea la ilusión de fusionarse con el mar en un entorno único y relajante. La variedad en las alturas y tonalidades del pavimento de gres y la distribución en diferentes niveles dentro de la piscina, añaden dinamismo y funcionalidad.
La vegetación circundante no solo aporta privacidad a los huéspedes, sino que también oculta las barandillas de vidrio. Este enfoque en la integración del entorno y la creación de espacios acogedores hacen del solarium un lugar excepcional para disfrutar de la estancia en el hotel. En general, el diseño de interiores del Hotel Chiqui refleja una cuidadosa planificación y ejecución para brindar una experiencia inolvidable a los visitantes.
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